La Reacreditación es un reconocimiento público que se relaciona de manera directa con el cumplimiento de las exigencias del Modelo de Evaluación y Acreditación Institucional, de carrera o programa Universitaria de Panamá.
La ley 52 de 26 de junio de 2015, que regula este proceso en el país , define la Re acreditación en los siguientes términos:
“ Renovación de la acreditación al término de la vigencia de la acreditación institucional, de carrera o programa previo al cumplimiento de planes de mejoras propuestos”.
La reacreditación puede ser aplicada considerando tres alcances distintos, estos son:
Reacreditación institucional
Reacreditación de carreras
Reacreditación de programas
Participan las personas o grupos internos y externos que brindan información pertinente sobre el quehacer de la universidad:
Autoridades
Docentes
Administrativos
Estudiantes
Graduados
Empleadores
¿Qué comprende el proceso de Acreditación Institucional?
Es un proceso evaluativo de manera progresiva que se realiza mediante tres fases:
1.
Autoevaluación: Es la evaluación interna donde la universidad asume la responsabilidad de evaluarse de manera integral a través de la recopilación y sistematización de la información que revela la realidad de la institución.
2.
Evaluación Externa: Proceso que involucra la participación de un grupo de especialistas, denominados pares académicos externos, quienes verifican el contenido del Informe de Autoevaluación, el plan de Mejoramiento Institucional y las condiciones internas en que opera la institución.
3.
Acreditación: Procedimiento que el organismo autorizado CONEAUPA, reconoce formalmente a través de una certificación que la institución de educación superior cumple con los estándares de alta calidad y es competente para realizar las funciones esenciales y avanzar sostenidamente a niveles crecientes de calidad.
¿Qué beneficios aporta la acreditación a la universidad?
Viabilidad legal para operar , de acuerdo a la normativa vigente.
Orgullo porque la calidad es reconocida públicamente.
Compromiso con la excelencia y estímulo a la mejora continua de la calidad de la universidad.
Oportunidad de elevar su prestigio, atrayendo mejores docentes y estudiantes.
Competitividad de los graduados en el mercado laboral.
Carreras compatibles con ofertas internacionales.
Objetividad en la selección de universidades y carreras, por parte de estudiantes de primer ingreso.
Poder de negociación de la universidad al suscribir convenios de cooperación nacionales e internacionales.
Calidad de la universidad, al evaluarse con estándares que se someten a un proceso de mejora continua, de acuerdo con la evolución de los conocimientos, tecnología y necesidades de la sociedad, entre otros aspectos.
Cultura de calidad, al estimular a los participantes a evaluar los resultados de sus actividades e incorporar a las instituciones en ciclos periódicos de evaluación.